Se trata de una nueva especie de murciélago dorado, bautizado como Myotis midastactus. Este flamante animal nocturno destaca entre sus primos del género Myotis por su pelo color oro brillante, lanudo y corto; además de que su cráneo es más grande.
Vive en las sabanas del oriente boliviano, se alimenta de pequeños insectos y permanece durante el día en huecos de troncos y del suelo. Como dato curioso te contamos que los biólogos que lo descubrieron (el brasileño Ricardo Moratelli y el estadounidense Don Wilson) le pusieron el nombre de midastactus porque les recordó el mito griego del Rey Midas, que todo lo que tocaba se convertía en oro.