De todas las editoriales dedicadas al negocio, Marvel fue la empresa que resultó más conmocionada respecto a los trágicos acontecimientos del ataque a las Torres Gemelas.
Los motivos pueden ser muchos: en primer lugar, sus oficinas se encontraban a pocos metros del World Trade Center, y en segundo lugar, Marvel siempre ha mantenido una tradición americanista, que desde los tiempos del Capitán América, Stan Lee utiliza como bandera identitaria.
Hoy te invitamos a ver una serie de cómics que ponen sobre la mesa el discurso de Marvel sobre el 11 de septiembre.
The Amazing Spiderman #36 Vol. 2
Este cómic pasará a la historia por tratarse de la gran carta de Marvel hacia sus lectores, en una issue que obviamente no responde a la continuidad ficcional y que sirvió como medio de expresión de parte de todo el equipo.
En Amazing Spiderman #36 se muestra la llegada del popular héroe neoyorquino a la Zona Cero, atestiguando la dura labor del personal de bomberos de Nueva York así como muchos civiles que se prestaron a ayudar. Escrita por J. Michael Straczynski, la historieta muestra a superhéroes y villanos trabajando por igual en favor de rescatar a las víctimas. La narración aparece como una introspección del trepamuros donde se cuestiona constantemente: “¿Cómo dejamos que esto ocurriera?”.
Si bien la crítica especializada elogió este movimiento de Marvel en su momento, hoy por hoy puede parecer un poco ridículo ver al Dr. Doom llorando por las víctimas. Pero de nuevo, es claro que ésta issue no responde a una continuidad o universo ficcional, sino que existe en función de un mensaje. Si te interesa, puedes descargar esta edición especial de forma gratuita desde el comic store de Marvel.
El llamado al deber de los héroesPocos meses después de la salida de Amazing Spiderman #36, Marvel decidió que era momento de rendirle tributo a quienes participaron en las operaciones de rescate luego de los atentados. La línea Heroes se enfocó en el ciudadano común, prolongando la conclusión de Amazing Spiderman #36, que posiciona al mortal como el verdadero héroe tras la catástrofe.
Pasó el tiempo y la editorial de Stan Lee consideró que ya era hora de sacar rédito económico de la huella que dejaron los atentados en el imaginario colectivo. Fue entonces que promocionó la serie The Call of Duty, la cual no guarda ninguna relación con el conocido juego sino que se centró en tres mini series sobre policías, bomberos y médicos de emergencia.
Aprovechándose de la popularidad que tenían estos arquetipos, Marvel desenfundó todo su arsenal creativo en homenajear dichas profesiones y sacar algún dinero ya de paso.
El Acta Patriota y Civil War
En el 2006 Marvel continuó analizando la situación política en el evento Civil War, sobra decir que detrás de la historia de riñas y disputas entre el bando del Capitán América y el bando de Iron Man se esconde una reflexión sobre los atentados al World Trade Center y el Acta Patriota.
En la ficción, los sucesos que acontecen en Stamford sirven como analogía a los ataques del 11 de Septiembre, y a partir de ahí, cómo se desencadena la paranoia en toda la sociedad norteamericana. La cultura del miedo es uno de los mitemas más analizados en este cross over así como el debate entre seguridad versus libertades individuales. Aquí es donde entra el Acta Patriota.
El 26 de octubre del 2001 el congreso de los Estados Unidos aprueba un texto legal que ampliaba las facultades del Estado para combatir el terrorismo. Esto significó limitar muchas de las libertades individuales en función de una mayor seguridad. Si bien el acta fue aprobada por una mayoría abrumadora, muchos organismos se manifestaron en contra así como una minoría ciudadana.
Este debate se trasladó al cómic en el evento de Civil War. Luego de los trágicos sucesos de Stamford, el gobierno se empieza a replantear el hecho de que los superhéroes tengan identidades secretas, por lo que crea el Acta de Registro de Superhéroes, la cual obliga a los mismos a revelar sus identidades o de lo contrario serán considerados criminales.
En la ficción, los sucesos que acontecen en Stamford sirven como analogía a los ataques del 11 de Septiembre, y a partir de ahí, cómo se desencadena la paranoia en toda la sociedad norteamericana. La cultura del miedo es uno de los mitemas más analizados en este cross over así como el debate entre seguridad versus libertades individuales. Aquí es donde entra el Acta Patriota.
El 26 de octubre del 2001 el congreso de los Estados Unidos aprueba un texto legal que ampliaba las facultades del Estado para combatir el terrorismo. Esto significó limitar muchas de las libertades individuales en función de una mayor seguridad. Si bien el acta fue aprobada por una mayoría abrumadora, muchos organismos se manifestaron en contra así como una minoría ciudadana.
Este debate se trasladó al cómic en el evento de Civil War. Luego de los trágicos sucesos de Stamford, el gobierno se empieza a replantear el hecho de que los superhéroes tengan identidades secretas, por lo que crea el Acta de Registro de Superhéroes, la cual obliga a los mismos a revelar sus identidades o de lo contrario serán considerados criminales.
Ante este panorama el universo de superhéroes de Marvel se divide en dos bandos: Tony Stark, que nuclea aquellos que están a favor del Acta, y el Capitán América, que aboga por las libertades individuales. Misma discusión, mismo desenlace, no vale la pena spoilearlo por lo que recomiendo que leas Civil War para profundizar en el tema.