Margarita era conocida (tanto por los humanos como por los animales) por alimentar a multitud de animales callejeros que se reunían en su puerta cada mañana, y por llevar una bolsa con comida consigo a donde quiera que fuera, por si se encontraba algún animal poder alimentarlo.
Los perros incluso siguieron al coche fúnebre desde el velatorio, dispersándose solamente cuando el cuerpo estaba preparado para su cremación.
Los perros incluso siguieron al coche fúnebre desde el velatorio, dispersándose solamente cuando el cuerpo estaba preparado para su cremación.
Cuando Margarita falleció a principios de mes, los miembros de su familia se quedaron asombrados al ver aparecer unos perros callejeros en el velatorio
Resulta que Margarita había estado alimentando a animales callejeros en la puerta de su casa, e incluso llevaba comida encima cuando salía por si se encontraba alguno más.
De este modo hizo un montón de amigos caninos que ahora venían a lamentar su muerte
Al principio, los servicios funerarios no sabían que hacer, pero les dejaron entrar cuando se dieron cuenta de que estaban allí para mostrar sus respetos
“En nuestro dolor, estábamos felices de que estuvieran ahí, fue maravilloso,” dijo la hija de Margarita