De vez en cuando, todo nos sale mal. ¿Qué pasa? ¿Somos nosotros el problema? El mundo parece más hostil, nos cuesta mantener una visión optimista. Sin embargo, somos hermosos. Hemos luchado, resistido, nos mantuvimos en pie. A pesar de los problemas. A pesar de las dificultades. ¡No te des por vencido! ¿Ya te has puesto a pensar en todo lo que día a día logras, todos tus actos heróicos que pasan desapercibidos?
Estas son algunas razones (hay muchas mas, pero queríamos recordarte estos 11 pequeños milagros cotidianos) por las que tu valentía (silenciosa pero constante) mueve montañas.
- 1. Te levantas de la cama cada día Un nuevo día, una nueva aventura. Pase lo que pase, daremos nuestro mejor esfuerzo.
- 2. Sigues buscando el amor a pesar de todo ¿Desanimado? Yo también. Tengamos paciencia. Si el amor demora, no te culpes. Algo genial va a llegar. Falta menos.
- 3. Luchas contra tus miedos Te acompañan a todos lados, pero aprendimos a mantenerlos a raya. Los respetas... y te dejan tranquilo.
- 4. Mantienes la esperanza (sin ella no estarías vivo) El mundo ES un lugar maravilloso. Algunos días más que otros.
- 5. Sigues pensando que la gente es buena (aunque la evidencia a veces te deje perplejo) Cada vez que las personas te decepcionan o te parecen inentendiblemente crueles, sabes que es hora de equilibrar la balanza. Mientras tanto, piensas... "todos cometemos errores".
- 6. Escuchas tu voz interior (por más contrariante que sea) "Otra vez esta voz interior diciéndome qué es lo que tengo que hacer..." y debes seguirla porque sabes que suele tener razón.
- 7. Aceptas que la vida es confusa Y que la mayoría intenta hacer lo mejor que puede con la información que tiene.
- 8. Sabes que la amistad es un tesoro invaluable Porque te salva cada día.
- 9. Intentas dejar el pasado atrás (tanto en ti como en los demás) Aferrarse es fácil, es normal. Pero podemos desprendernos... y cambiar.
- 10. Si tienes que hacer un regalo, buscas que sea algo realmente especial Porque ver la cara emocionada de alguien que quieres te hace sentir demasiado bien.
- 11. Le das ánimo a la gente que te rodea (¡ánimo, amigos, vamos a conquistar el mundo!) Ya lo estamos haciendo, ¿no?
