Después de leer esto, quedarás sorprendido por la falta de escrúpulos que está padeciendo la sociedad el día de hoy.
Una nota verdaderamente humillante para la sociedad maternal, fue publicada en el diario de la Ciudad; donde al parecer el encabezado llama la atención para invitarte a leerlo, pues implica el deceso de un bebé de 8 meses.
Razón por la que se comenzó una investigación, pues la madre se notaba bastante nerviosa.
El nombre de la madre negligente es Martha Beatriz Oropeza, quien declara los hechos de esta manera:
“Yo sólo salí un par de minutos a la tienda de la esquina, pues necesitaba comprar detergente para ropa, y cuando volví a casa, mi bebé estaba muerto; debí tomar precaución de la muerte de cuna, pero se veía tan cómodo que no quise despertarlo”.
“Indagué el caso y quise ir en busca de la mujer, pero me amenazó si publicaba la nota en línea, así que esa es la razón por la que meramente lo hago anónimo.”
Resulta que la mujer se encontraba sola en casa, pues su marido es un trabajador de una empresa de autobuses muy famosa y es la razón por la que deben acoplarse a una relación matrimonial a distancia; al parecer su marido llevaba una semana sin poder pasar una noche con su esposa, y los días que se encontraba en casa prefería descansar.
La mujer comenzó a sentirse sola y abandonada, entonces comenzó a buscar una salida de desahogo con uno de sus vecinos, ya sabrán qué tipo de desahogo me refiero; sí, ella se revolcaba con el vecino mientras su marido trabajaba, acostumbraba dormir a su bebé para posteriormente irse de sucia.
Esa tarde cuando volvió de la casa de su vecino, quien también es un hombre casado, decidió darse una ducha y acostarse a dormir, sin prestar atención al inocente bebé; cuando despertó de su “pequeña siesta” se levantó a dar de comer al pequeño, cuando se percató que su cuerpecito se encontraba frío en extremo y con un tono azul; el bebé falleció porque se dio la vuelta y quedó boca abajo, causando una asfixia con la cobijita, la cual no era suficiente para el tremendo frío que hacía entre el frío de la habitación, ya que ésta contaba con azulejo en las paredes.
La mujer fue detenida, pero más tarde se puso en libertad condicional.
Resulta que aparte de sucia y caliente, mentirosa; motivo único por el que se ordenó su detención; su abogado la liberó de las rejas, debido a que aclaró que había sido un mero accidente de muerte de cuna.