Él nunca había visto claramente a su familia y solo podía “ver” con sus manos: reconociendo a su padre por el tacto de su barba, o a su madre tocando su cara.
Gracias a las gafas especiales para niños de Miraflex, el pequeño Leo finalmente tiene la oportunidad de ver.
Después de unos momentos, vas a verle entender que algo ha cambiado, y, cuando mira a su madre la primera vez, sonríe.
En el siguiente emotivo video, Erin, la madre de Leo, le pone las gafas a su hijo por primera vez.