La investigación publicada en la revista Behavioral Neuroscience, abre nuevos caminos en la investigación mediante la identificación de la sabiduría bajo las condiciones que tienen impactos fisiológicos de buen criterio.
"Nuestra investigación muestra que el razonamiento racional no es exclusivamente una función de la mente y de la capacidad cognitiva", aseguró el autor de la investigación Igor Grossmann. "Hemos encontrado que las personas que tienen una mayor variabilidad de la frecuencia cardíaca y que son capaces de pensar en los problemas sociales desde un punto de vista la distancia demuestran una mayor capacidad para el razonamiento racional."
"Nuestra investigación muestra que el razonamiento racional no es exclusivamente una función de la mente y de la capacidad cognitiva", aseguró el autor de la investigación Igor Grossmann. "Hemos encontrado que las personas que tienen una mayor variabilidad de la frecuencia cardíaca y que son capaces de pensar en los problemas sociales desde un punto de vista la distancia demuestran una mayor capacidad para el razonamiento racional."
El ritmo cardíaco humano tiende a fluctuar, incluso durante condiciones de estado estacionario, por ejemplo mientras una persona está sentada. La variabilidad del ritmo es el intervalo de tiempo entre los latidos del corazón y está relacionado con el control del sistema nervioso y la función de los órganos.
Los investigadores encontraron que las personas que tienen frecuencias cardíacas más variadas, eran capaces de razonar de una manera más inteligente y menos sesgada acerca de los problemas sociales cuando se les instruyó para reflexionar sobre un problema social desde una perspectiva en tercera persona. "Sin embargo, eso no significa que estas personas son más sabias, de hecho, algunas personas pueden usar sus habilidades cognitivas para tomar decisiones imprudentes, sin poder superar sus puntos de vista egocéntricos ". Aseguró Grossmann.
Los investigadores encontraron que las personas que tienen frecuencias cardíacas más variadas, eran capaces de razonar de una manera más inteligente y menos sesgada acerca de los problemas sociales cuando se les instruyó para reflexionar sobre un problema social desde una perspectiva en tercera persona. "Sin embargo, eso no significa que estas personas son más sabias, de hecho, algunas personas pueden usar sus habilidades cognitivas para tomar decisiones imprudentes, sin poder superar sus puntos de vista egocéntricos ". Aseguró Grossmann.