Sarah Conque es una chica de 28 años del Sur de Luisiana. Durante un viaje de ayuda humanitaria a Haití, trabajó con niños discapacitados en un centro médico infantil sin ánimo de lucro, gracias a su titulación como Especialista en Recreación Terapéutica. Sarah ayudó a innumerables niños a crecer y desarrollarse como parte de su labor en el Centro Médico Infantil de Danita. 

ANUNCIO PATROCINADO





Pero ninguno de estos niños le llegó tanto al alma como Nika. Cuando solo tenía 3 meses, una mujer que declaraba ser su tía la llevó al Centro. Nika se encontraba en muy malas condiciones y parecía tener un grave caso de hidrocefalia. Necesitaba una operación urgente y, por suerte, Sarah pudo asegurarle un puesto en la lista de espera para ser operada. 
Instagram/littlewarriornika
La operación de Nika fue bien y, finalmente, Nika podía irse a casa. Pero por desgracia su tía la había abandonado en el hospital. Tras muchas llamadas y ruegos, pudieron convencerla de que volviera a recoger a Nika, pero finalmente se descubrió que realmente era la madre de Nika. El estigma de tener a una niña discapacitada era más de lo que podía soportar, pero Sarah persistió y le ofreció mucha ayuda. Tras un par de visitas médicas, la madre de Nika volvió a dejar de aparecer. Cuando Nika tenía 11 meses y su madre había faltado a varias visitas al médico, Sarah se vio obligada a ir a casa de Nika. Lo que allí encontró le partió el corazón.
Twitter/GodVineCom
Nika estaba sola en casa, rodeada de basura. Los peores temores de Sarah se habían convertido en realidad. Nika había sido descuidada durante todo 1 año. Sarah pidió a la fundadora del Hospital Infantil de Danita si podían acoger a Nika,  a lo que ella accedió de inmediato. Empezaron a tratar a Nika para que se recuperara, pero los médicos le recordaron a Sarah que las posibilidades de supervivencia eran muy bajas. El 99% de los niños con su edad no llegan a su primer cumpleaños. Pero Nika luchó, y lo mismo hizo Sarah. Nika empezó a recuperarse.
Instagram/littlewarriornika
6 meses más tarde, Sarah se convirtió en la cuidadora de Nika las 24 horas del día y en su tutora legal.  Pudo hacer que Nika fuera a EEUU con un visado médico, donde logró ser tratada de la mejor manera, lo que mejoró drásticamente su vida.  Ahora, con 2 años de edad, Nika ha superado todos los pronósticos.
Instagram/littlewarriornika
Los milagros existen. La transformación de Nika es prueba de ello, y gracias a Sarah fue posible. Comparte esta increíble historia con tu familia y amigos. 

ANUNCIO PATROCINADO



Con la tecnología de Blogger.