Tonik, una encantador perro mezcla de caniche y Shih Tzu adoptó la cara de su antiguo dueño. El perro, de dos años y 11 kilos de peso, tiene un rostro inquietantemente humano, especialmente sus ojos.
Tonik busca un nuevo hogar después de haber sido rescatado de un refugio para perros abandonados en Kentucky, EE.UU.
El perro se salvó de ser sacrificado gracias al Grupo de Bienestar Animal de Vuelta a Casa de Mishawaka, Indiana, que lo describe como "un chico muy dulce que disfruta de la gente".
El centro dice que está muy bien con otros perros y no es peligroso, pero que no debe ser puesto en contacto con niños pequeños porque estaría demasiado abrumado, después de una vida no demasiado feliz.
Para adoptarlo habría que depositar 250$ en concepto de gastos veterinarios. La organización no hace envíos, por lo que si está interesado tendría que ponerse en contacto con ellos y recogerlo en el refugio del Grupo de Bienestar Animal.
Se añade que necesita una casa que emane buena energía y paciencia, pero que no haya niños pequeños que abrumen a Tonik.