Pero el factor limitante de la levitación magnética requiere una base sobre la cual pueda volar, lo que efectivamente requiere que los objetos sean estacionarios. Esto en gran parte le pone fin al sueño del aeropatín inspirado por "Volver al futuro" pero el transporte parece ser la industria mejor ubicada para hacer uso de la técnica.
Hasta hace poco, se esperaba que los trenes "Maglev" (levitación magnética) revolucionaran el transporte público, prometiendo velocidades que superan los 482 km/h. Sin embargo, el alto costo y el consumo de energía han reducido el ritmo de su crecimiento, y hoy en día, solo China y Japón operan tal sistema.
Eso podría cambiar con la llegada de los vehículos impulsados por un súper conductor, capaces de generar una fuerza magnética mayor con un menor consumo de energía. Los proyectos destacados como el 'Super Maglev' de China utilizarían este sistema para el transporte supersónico, e incluso podría funcionar para las misiones espaciales.
En muchos casos, las tecnologías de la levitación todavía tienen que encontrar funciones significativas, ya sea al cumplir con propósitos novedosos o al superar la etapa de investigación. Pero las posibilidades se están multiplicando, y las aplicaciones están llegando a establecerse en campos como el entretenimiento y el transporte.
Si el avance continúa, los magos podrían tener que aprender nuevos trucos.