Los manifestantes exigían el fin del gobierno autoritario del régimen, cuyo origen se remonta al padre del actual jefe de gobierno, Hafizal al Asad, quien accedió al gobierno en 1971 luego de un golpe militar. El gobierno reprimió las protestas con violencia e hizo uso de la fuerza tanto militar como paramilitar. Pronto comenzaron a gestarse milicias de la oposición y para 2012 el conflicto se transformó en una guerra civil.
En julio de 2011 se formó el Ejército de Liberacion Sirio (ELS) con el objetivo era derrocar al gobierno. Estaba conformado por diferentes grupos tribales locales y desertores del ejército del gobierno.
Luego se sumaron yihadistas, algunos de ellos sirios y otros de terceros países. De esta manera se mezclaron objetivos políticos (derrocar al gobierno, impulsar reformas) con objetivos religioso conservadores de corte islámico. Así se intensificó la violencia, proveniente no solo del bando gubernamental sino también del ELS.
El drama de los refugiados
A medida que la guerra civil se extendió y se hizo más virulenta, miles de personas comenzaron a mudarse de ciudad en ciudad, muchas de ellas dirigiéndose –primero- hacia la frontera con Turquía.
Ante esta realidad, la ONU indicó que tiene la necesidad de reasentar con urgencia a 30 mil sirios de un total de 2,8 millones que abandonaron el país.
Familias sirias a Uruguay
La idea del presidente José Mujica de reasentar a familias sirias en Uruguay surgió luego que el canciller Luis Almagro, en un viaje por Jordania, viera la realidad de un campo de refugiados donde viven miles de personas que escaparon de la guerra en Siria. El gobierno gestionó la llegada de 120 sirios, la mayoría menores, que llegarán en dos tandas. El primer grupo de 42 personas arribó este jueves 10 de octubre y los restantes lo harán en febrero de 2015.
En principio, en forma transitoria por 90 días, las familias
sirias se alojarán en la casa de retiro “San José” de los Hermanos Maristas. Se espera que allí realicen “su adaptación” a Uruguay. La intención del Poder Ejecutivo es que luego se alojen en otros lugares, incluidas casas de familia.
El Gobierno se encargará de brindarles apoyo sicológico, alimentación, servicios de salud y formación laboral.
En principio, en forma transitoria por 90 días, las familias
sirias se alojarán en la casa de retiro “San José” de los Hermanos Maristas. Se espera que allí realicen “su adaptación” a Uruguay. La intención del Poder Ejecutivo es que luego se alojen en otros lugares, incluidas casas de familia.
El Gobierno se encargará de brindarles apoyo sicológico, alimentación, servicios de salud y formación laboral.
Hassan Mamari enseñará árabe coloquial a quienes rodeen a los migrantes durante la primera etapa de adaptación. Los talleres forman parte de una propuesta realizada por la Facultad de Humanidades al gobierno, para colaborar con la integración de los refugiados a su nuevo entorno.
También brindará asistencia en los cursos de español que recibirán las familias sirias, sobre todo en la primera etapa de adaptación.
El secretario de Derechos Humanos, Javier Miranda, explicó que se ha conseguido trabajo para todas las familias aunque falta encontrar vivienda para una de ellas. El programa incluye un equipo técnico compuesto por un trabajador social y un psicólogo, que acompañarán a las familias durante dos años.
Esta foto compartida en Twitter por la periodista de CNN, Claudia Rebaza, muestra el momento en las primeras familias sirias esperan en el aeropuerto de Beirut para abodar el avión que los saque del infierno de la guerra y los traiga a Uruguay.