¿Qué es un Otaku? El término otaku se emplea popularmente en Japón como sinónimo de persona con aficiones obsesivas y se aplica a cualquier tema o campo, aunque sobre todo al fandom de anime y manga. El uso contemporáneo de este término se originó en un ensayo de 1983 por Akio Nakamori en la revista Manga Burikko. En Japón el término tiene una connotación peyorativa, de la misma manera que en occidente se emplean adjetivos como «friki» o «nerd».
Su negatividad deriva de la visión estereotipada de los otakus y de los reportes de los medios de comunicación sobre Tsutomu Miyazaki en 1989, conocido como «el Asesino Otaku». Fuera de Japón se usa especialmente para los aficionados a cierto tipo de cultura popular japonesa, en especial al anime, manga o cosplay.
Esta subcultura, cuya fama se disparó tras el boom del anime en los años 90 a nivel mundial, ha tenido un crecimiento exponencial y su impacto económico, según el Instituto de Investigación Nomura (Japón), no es nada desdeñable: se calcula que alcanza los cerca de 14.000 millones de euros.
El término Otaku, que desde hace años cuenta con su propio día de celebración, no entiende de edades y puede ser aplicado tanto a hombres como mujeres indistintamente.
Los diversos intereses de la subcultura otaku han dado lugar a numerosas clasificaciones sobre los otakus. En el año 2005, el Instituto de Investigación Nomura clasificó a los otakus en doce grupos y estimó el tamaño y la repercusión en el mercado de cada uno de estos grupos. Otras instituciones los clasificaron más a fondo o se centraron en un único interés otaku. Estas publicaciones no se refieren exclusivamente al anime y manga otaku, clasificando en distintos grupos otakus de fotografía, automóviles, idol, y electrónica. El impacto económico de la cultura otaku ha sido estimado aproximadamente en dos billones de yenes.