Sangre fuera (literalmente) cuando recibes un golpe
Este proyecto buscaba que sintieras los videojuegos al máximo. Así, si en la acción recibías un golpe o un disparo, un sensor conectado a una máquina de extracción de sangre se encargaba de chupar de tu brazo. Cuando el proyecto llevaba unos días sobre la plataforma, fue retirado sin explicaciones por parte de la compañía.
Jabón con aroma a carne
Nació con una premisa sencilla: “We love meat and we love soap” (“Amamos la carne y amamos el jabón”). Y qué mejor que lavarte las manos y que te quede fragancia de bacon. Este proyecto es de 2011, y no sabemos qué habrá sido de la compañía desde entonces. Logró el dinero suficiente en Kickstarter, aunque viendo su falta de actividad en Twitter y Facebook, nos imaginamos que las cosas no han ido muy bien después.
Bacon de cristal
Greg Kiesow quiso rendir un tributo a la “impresionante” panceta (como él mismo la definió) y diseñó esta escultura de cristal (en realidad, “plástico acrílico de gran calidad”, según la descripción) que recaudó 2.786 dólares cuando Kiesow se conformaba con 2.000.
Un juego de mesa para tirarse pedos
‘Poop: The Game’ (‘Caca: El juego’) es parecido al Uno: tienes cartas con diversas imágenes un poco escatológicas (como retretes y plastas). Las vas soltando encima de la mesa. En determinados momentos te tocará tirate un… ya sabes. ‘Poop: The Game’ se vendió en Kickstarter como un juego “creado por niños y adultos para niños y adultos” y tiene versión ‘drinking game’. ¿A qué esperas para probarlo?
Mandar un trozo de pizza al espacio
Todos sabemos que los astronautas almuerzan comida en tubitos y deshidratada. Quizá mandarles un filete o una ensalada sea algo extremo, pero un simple trozo de pizza es todo un gesto simbólico que, sin duda, agradecerán. El grupo de música Anamanaguchi lo hizo. En realidad, metió una porción de este delicioso plato en un globo y lo mandó al cielo. Todo formaba parte de la campaña de financiación para su nuevo disco: grabaron ese lanzamiento para uno de sus videoclips. El ‘crowdfunding’ recaudó más de 250.000 dólares, cuando solo pedían 50.000.
Una escultura inflable de Lionel Ritchie
Entre ellos, está una divertida escultura de la cabeza del cantante Lionel Ritchie para el Bestival 2013, en Inglaterra. Los organizadores pudieron obtener el dinero y se hizo un cabezón que parece fabricado con plastilina.
Una ensaladilla de patata
Este es uno de los proyectos más míticos. Un joven pidió 10 dólares para preparar una ensaladilla de patata y terminó recaudando más de 5.000. El chico llegó incluso a probar diferentes recetas, para deleite de sus financiadores. ¿Has anotado alguna de ellas?
La espada-sartén
¿Sirve para freír huevos o para golpear a un adversario? Para ambas cosas, parece. La Combat Kitchenware se hizo con más de 46.000 dólares, cuando su autor solo pedía 7.000 dólares. Destaca su mango “bien resistente”, óptimo para cualquier guerrero de los fogones.
Calzoncillos para inflar el paquete
Eso de utilizar relleno en los gayumbos para aparentar, en realidad, es muy viejo. Sin embargo, es uno de los proyectos más insólitos que han pasado por Kickstarter: unos calzoncillos con abultado paquete que han dado el salto a la era digital añadiendo un código QR a la parte trasera de la prenda. La bolsa delantera promete seguridad y confort, y el código QR un mensaje picante. ¿Alguien los ha probado?
El patinete de ‘Regreso al futuro’
Cerramos la lista con uno de los proyectos más esperados para este año. La campaña que permitirá que el aerodeslizador que aparece en ‘Regreso al futuro’ sea realidad fue todo un éxito el pasado mes de noviembre. Funciona con la misma tecnología de levitación magnética que algunos trenes de alta velocidad. “Si un tren de 50.000 kilogramos puede flotar, cualquier cosa puede hacerlo”, explicó su creador, Greg Henderson. ¿Quién quiere hacerse con uno?