Participó a lo largo de siete años, de la compañía de danza Nandayure como bailarín, interprete, y coreógrafo.
A partir del año 2001, entró a la compañía de percusión residual, El Choque Urbano, donde comenzó su escuela independiente de formación como artista. Las puertas que el grupo le abrió, tanto a la música, como al teatro, sumado a su búsqueda personal, fueron muchísimas y muy grandes.
Con el grupo crearon 2 obras, "Fabricando Sonidos" y "La Nave" a lo largo de siete años de trabajo, incluyéndose en ésta última además como coreógrafo. Participaron de diversos festivales de música y teatro, realizando tres giras nacionales, y tres más en centroamérica, visitando países como Perú, Brasil, Uruguay, Paraguay, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Guatemala, también girando en Holanda, Corea y Siria.
Las experiencias fueron juntándose, y llegó la necesidad de empezar a transmitir este lenguaje que en él se gestaba.Empezó a dar clases de movimiento y experimentación corporal, utilizando el cuerpo como herramienta en acción y entrenándolo para abarcar un espacio escénico.
También comenzó a dar clases de percusión corporal, dándole al cuerpo sonido y movimiento. Trabajando la disociación, e improvisación, convirtiendo el cuerpo en una gran caja sonora.
También comenzó a dar clases de percusión corporal, dándole al cuerpo sonido y movimiento. Trabajando la disociación, e improvisación, convirtiendo el cuerpo en una gran caja sonora.
En el siguiente video de la conocida canción El pollito Pío, Rosso da muestras de un gran histrionismo y sentido del humor al interpretar a su modo esta canción.
Mira el divertido video tras el salto: