A veces nos sentimos cansados, más tristes y apagados sin un motivo aparente, pero quizás haya que preguntarse... ¿Qué comemos? Todo lo que ingerimos juega un papel fundamental en nuestro estado anímico. Por eso, seleccionamos algunos alimentos que seguramente no sepas que te deprimen y otros que, por lo contrario, tienen el poder de afrontar los periodos depresivos.
A veces nos sentimos cansados, más tristes y apagados sin un motivo aparente, pero quizás haya que preguntarse... ¿Qué comemos? Todo lo que ingerimos juega un papel fundamental en nuestro estado anímico. Por eso, seleccionamos algunos alimentos que seguramente no sepas que te deprimen y otros que, por lo contrario, tienen el poder de afrontar los periodos depresivos.
- Edulcorantes artificiales SÍ. Un estudio estadounidense sobre nutrición ha determinado que la ingesta abusiva de endulzantes artificiales frenan la producción de serotonina y dopamina, y por tanto la sensación de bienestar, pudiendo producir ataques de ansiedad y sensación de tristeza.
- Melaza NO. Todo lo contrario pero con control, ya que es un azúcar. Rica en uridina es capaz de motivar el proceso de fabricación de energía en las célular para combatir la depresión.
- Alimentos procesados SÍ. Carnes muy grasas, el chocolate con leche o blanco, postres azucarados... El exceso de este tipo de comida que contiene sustancias químicas dañinas, provoca el desarrollo de inflamaciones y enfermedades cardiovasculares.
- Cacao NO. Los alimentos ricos en selenio combaten los signos de la edad, fortalecen el cerebro y controlan los estados anímicos, por lo que se le considera un buen antidepresivo natural. Está demostrado que consumir chocolate puro beneficia no sólo la salud física sino también la emocional.
- Fritos SÍ. Así lo dice un estudio del Hospital Universitario de Montreal, los alimentos que contienen en gran proporción grasas saturadas ayudan a desarrollar conductas depresivas por producir una disminución de la producción de serotonina cuando se consumen en exceso.
- Pescado azul NO. El atún, salmón, los boquerones... En definitiva los pescados ricos en ácidos grasos Omega 3 son conocidos por mejorar el sistema cardiovascular y regular el colesterol. Pero también contribuyen a combatir el estrés y la depresión.
- Lácteos altos en grasa SÍ. Los lácteos son buenos para la salud con un control de grasa (desnatados o semidesnatados), pero las grasas saturadas están presentes en algunos tipos de quesos untuosos, yogures y determinados postres, son conocidas, entre otras cosas, por relacionarse con síntomas depresivos.
- Soja NO. Un alimento cada vez más y más extendido en Occidente. Se considera beneficioso por muchos motivos pero además, por contener ácidos grasos Omega 3 ayuda a combatir la depresión.
- Cereales refinados SÍ. Harinas refinadas, pan blanco... Todos ellos aumentan las posibilidades, si se ingieren en exceso, de sentirse más triste y apagado a la larga.
- Nueces NO. Las nueces son una gran fuente de ácido alfa linolénico, uno de los componentes grasos del Omega 3. Se recomienda masticarlas para luchar contra la depresión, además protegen el corazón.
- Refrescos azucarados SÍ. El gas y el azúcar en los refrescos alivian en un plazo corto pero a la larga, el consumo de más de un litro al día de estas bebidas (y más las famosas 'light' con edulcorantes artificiales) aumentan las posibilidades de padecer un periodo depresivo.
- Cereales integrales NO. En general los hidratos de carbono complejos son realmente útiles para afrontar bajos estados de ánimo como los propios del síndrome premenstrual. Calman el sistema nervioso gracias a sus propiedades nutritivas como vitaminas del grupo B.
- Alcohol SÍ. Siempre y cuando se abuse de él y durante un tiempo prolongado, llegando a la adicción. Interfiere en receptores del sistema nervioso y puede ayudar a caer en un estado depresivo.
- Avena NO. Es uno de los llamados 'súper alimentos' al evitar bajones de azúcar que tanta irritabilidad y cambios de humor producen. Ayuda al sistema digestivo gracias al ácido fólico y las vitaminas B1 y B6.
- Vitamina C NO. Este tipo de vitamina no sólo contribuye a prevenir algunos tipos de cáncer, sino también enfermedades coronarias y el estrés.