
La situación arrancó de forma bastante habitual, con un semáforo que se pone en rojo. Sin embargo, parece que el conductor de un camión se durmió en ese momento, viéndose obligado a realizar una frenada extrema, saliéndose de su carril y derrapando en dirección a un nutrido grupo de peatones, que huyen despavoridos. Milagrosamente, nadie resultó herido. El incidente ocurrió el pasado 28 de junio en Moscú.