En un principio, Brenda pensó que sólo eran causa del roce con el castillo inflable. Pero, luego de un par de días, éstas empezaron a crecer, hincharse y ponerse muy feas. Fue ahí cuando Brenda llevó a su hijo al doctor y él les preguntó cuáles fueron las últimas actividades que hizo el pequeño.
Cuando la madre le comentó de este juego inflable, el médico le dijo que su hijo tenía una infección por estafilococos. Este tipo de bacteria puede vivir sin ocasionar daño en muchas superficies de la piel. Sin embargo, cuando la piel se lastima o sufre una punción, ésta puede ingresar en la herida y provocar una infección.

Si bien las personas pueden contraer infecciones por estafilococo por el contacto con objetos contaminados, la bacteria generalmente se propaga a través del contacto de piel a piel: la bacteria puede expandirse de una zona del cuerpo a otra si alguien toca la zona infectada.
Como lección, la próxima vez que alquiles una casa inflable para la fiesta de tu hijo, asegúrate de preguntar por sus prácticas de limpieza. También puedes ser más precavido y regarlo con un limpiador suave antes de que todos los niños empiecen a saltar y bajar.