
Jordan Anderson trabajó toda su vida como constructor de casas de madera por encargo, por eso adquirió su esta habilidad: mirá como transforma un tronco milenario en una escena de dos renos peleando. El escultor tiene un gran talento, pero no se la cree a pesar de ser reconocido y se ve como un estudiante: "Crecí en un pequeño pueblo de Minnesota, ubicado en el Lago Pokegama donde rápidamente aprendí a apreciar las maravillas de la naturaleza por la pesca, la caza y camping en la tierra del norte", escribió en su página web.