
Las inclemencias del tiempo y el impacto del polvo y otras partículas van dañando nuestros faros hasta volverlos opacos, dificultando la iluminación de la carretera. Conducir con las luces de nuestro vehículo en mal estado supone un riesgo para nosotros mismos y otros conductores; y por eso debemos pulirlos para que recuperen su antiguo esplendor. ¿Te ha gustado este video? Entonces No te olvides de compartir y darle Me gusta. Gracias!