
Después de ser rescatada por una husky llamada Lilo, la pequeña gatita Rosie se ha convertido en una sensación de las redes sociales. No tenía un futuro muy esperanzador pero esta perrita le salvó la vida adoptándola como si fuera su propia hija. Hoy ambas salen de paseo con sus otros amigos caninos y no solo porque sea tierna, sino porque le encanta caminar junto a ellos con su pequeña correa.