
Vladímir y Ekaterina M., padres de la niña de cuatro años que fue decapitada esta mañana en Moscú, se encuentran en estado de "shock" y han sido atendidos por doctores de la Policía local. Al conocer la noticia, la madre de Nastya M. se desmayó y fue trasladada en una ambulancia a un hospital de la capital rusa. El padre ha sufrido un colapso nervioso. Este lunes la Policía de Moscú ha detenido a una mujer vestida de negro que portaba en una mano la cabeza de una niña. Según los informes, la mujer gritaba 'Allahu Akbar' ('Dios es grande' en árabe).