Esta bicicleta de última generación incluye algo parecido a un teléfono en el manillar. Una pantalla de cuatro pulgadas permite al usuario hacer llamadas y enviar mensajes de texto, aunque las características más interesantes están relacionadas con la bicicleta en sí. Funciona con Android, el sistema operativo de Google, y cuenta con 4 GB de RAM para ejecutar aplicaciones cómodamente.
Con Le Syvrac es muy fácil acceder al GPS para consultar rutas y direcciones. Oculto en el manillar está el sensor de frecuencia cardiaca, un extra que permite hacer un seguimiento más preciso de la condición física del ciclista mientras está en movimiento. También se han incluído algo parecido a unos intermitentes y, con solo pulsar un botón, unas luces parpadean para indicar la dirección en la que se está girando.
Con Le Syvrac es muy fácil acceder al GPS para consultar rutas y direcciones. Oculto en el manillar está el sensor de frecuencia cardiaca, un extra que permite hacer un seguimiento más preciso de la condición física del ciclista mientras está en movimiento. También se han incluído algo parecido a unos intermitentes y, con solo pulsar un botón, unas luces parpadean para indicar la dirección en la que se está girando.
Una de las características más interesantes de esta bicicleta son los punteros láser. Por la noche, dos láseres de color rojo -uno a cada lado- señalan a los conductores de vehículos la distancia de seguridad que deben respetar para no poner en riesgo al deportista. En general, los sensores y las funcionalidades están diseñados para potenciar el rendimiento del ciclista y para mejorar su seguridad en la carretera.
El Leeco Le Syvrac ya está a la venta en China. Hay tres configuraciones distintas con precios que van desde los 800 dólares hasta más de 6.000 (para la configuración a base de fibra de carbono). Según ha informado la revista digital Digital Trends, la compañía quiere llevar su bicicleta inteligente a Estados Unidos a finales de este año.
