Michael Myers
Se siente, pero al César lo que es de César. Imposible no comenzar por el brutal asesino de la saga Halloween, que desde 1978 ha repetido fórmula hasta en diez ocasiones -nueve en realidad, ya que no sale en la tercera- y con la úndécima prevista para 2017. A lo largo de este tiempo Michael Myers ha evolucionado de ente sobrenatural a sicópata “común”, pero no es ese el dato relevante: solo la máscara asusta y detrás de ella hay un armario ropero cuasi inmortal, vestido con mono de trabajo y cuchillo de carnicero en mano.
Jason Voorhees
¿Mismo perro con distinto collar? Pues sí, para qué vamos a engañarnos. La influencia es clara… digo oscura. Pero merecía el sitio. El también brutal asesino de la serie Viernes 13 no apareció como tal, con la máscara de hockey que lo caracteriza, hasta la tercera entrega, en 1982. Sin embargo, Jason Voorhees llevaba matando desde 1980. En 2003 incluso llegó a enfrentarse a un villano de su nivel, nuestro siguiente invitado.
Freddy Krueger
Inolvidable. Robert Englund encarnó a Freddy Krueger en siete de las ocho películas de Pesadilla en Elm Street, además de en Freddy vs. Jason, en un periodo que abarca de 1984 a 2003. ¿Qué tenía un asesino de niños quemado vivo y reencarnado en vil criatura del mundo de los sueños para gustar tanto? Las pelis eran de miedo, pero el personaje en sí era bastante cachondo…, dentro de lo sádico.
Pinhead
“Cabeza de alfiler” surgió de la imaginación y pluma del escritor y cineasta británico Clive Barker, como novela y película, aunque fue en el cine donde la franquicia echó raíces. De 1987 a 2011 se sucedieron hasta nueve cintas en total y, parece, hasta ahí ha llegado la historia. Ni Pinhead fue el nombre original del personaje, ni Hellraiser la saga más popular de su género. Pero quien no reconozca ese careto, es que nunca entró en un videoclub.
Chucky
Con lo majo que se veía el muñeco en la tienda, y lo criminal que se vuelve cuando el alma de un asesino en serie lo posee. ¡Qué cosas! El muñeco diabólico se estrenó en 1988 y desde entonces han caído seis largometrajes, según se cuenta, con uno más en camino. ¿Traerá consigo alguna novedad? Porque Chucky será un muñeco, pero ha tenido novia e incluso un hijo.
Tall Man
¿Un anciano trajeado da miedo? “El hombre alto” era más que eso, y es que regentaba un negocio de pompas fúnebres de lo más particular. Hablo en pasado porque Angus Scrimm, el intérprete que le dio vida en cinco ocasiones, falleció a principios de año. Aun así, volverá a ser el hombre alto una vez más, en la última entrega que aún está por estrenarse este 2016. Phantasm no ha sido la saga más memorable, pero si ha aguantado desde 1979 hasta ahora, fue en gran parte por la labor de Angus Scrimm.
La ‘Cara de Fantasma’
La vimos en… Las cuatro partes de Scream (1996-2011)
Además del suspense inherente a cualquier slasher, la máscara espectral de la saga Scream oculta un secreto particularmente incordiante. Porque, como bien nos ha enseñado Wes Craven en su saga, bajo la identidad de ‘Cara de Fantasma’ puede esconderse cualquiera. Menos Neve Campbell, Courteney Cox y David Arquette, claro.
Inspirada en el cuadro El grito de Edvard Munch, la máscara de este psychokiller no nació directamente en el cine, sino que fue creada por la compañía de disfraces Fun World en 1992. Craven, la productora Marianne Maddalena y el maquillador Gregg Nicotero (Kill Bill) optaron por emplearla cuando vieron que la fecha de rodaje se les echaba encima sin encontrar ningún diseño a su gusto. Desde el estreno de la primera Scream, es la careta de Halloween más vendida todos los años en EE UU.
El bozal de Hannibal Lecter
La vimos en… El silencio de los corderos (1991) y Hannibal (2001)
Por inhumana que nos parezca, la decisión de ponerle una mordaza así a un paciente psiquiátrico indica sólo una cosa: estamos ante un tipo muy, muy peligroso. Un psiquiatra caníbal, capaz de sobrevivir hasta en el infierno y con todo el carisma de Anthony Hopkins, por ejemplo.
Nos encantaría decir que los bozales penitenciarios como el de Hannibal no existen en la realidad, pero sí que se utilizan. Sin ir más lejos, el ladrón y violador Anthony Watson fue castigado con uno de ellos el pasado mayo por insultar y escupir a un tribunal de Florida durante su juicio. Como dato curioso, digamos que esta máscara estuvo a punto de cubrir los rasgos de Gene Hackman, quien (por suerte para Hopkins) abandonó El silencio de los corderos antes de su rodaje.
Jigsaw
Cerramos con el maloso de turno más conocido de la actualidad, que a la vez es muñeco y sicópata. Afectado por una “ludopatía” extrema, siete películas lleva el tipo de Saw agasajando a sus invitados con juegos de lo más variopinto. Sea como fuere, había que cerrar con algo más de esta época y no iba a ser con el enmascarado de Scream.