¿Qué sabes del papel de aluminio? El aluminio es uno de los metales que se encuentran en el bloque P de la tabla periódica de los elementos. Está junto con los metaloides o los semimetales.
Este elemento tiende a ser blando y tiene un punto de fusión relativamente bajo, con 661.32 grados Celsius. Su punto de ebullición está en los 2519.85 grados centígrados,pero sabías que puede aliviar el dolores, pues es cierto. Descubre como debes hacerlo, es increible.
Lo más interesante de este metal es que puede activar ciertos puntos biológicos en los que se genera el dolor y llega a modificarlos para aliviarlo. Así, podemos eliminar cualquier tipo de dolor que hayamos estado sufriendo durante un tiempo prolongado.
Quizá te estás preguntando cómo puede pasar esto. Verás, el científico ruso A. V. Skvortsov sugiere que el núcleo celular del cuerpo humano interactúa directamente con el campo magnético de la Tierra. Si este campo se deforma, no puede haber una correcta nutrición celular.
Entonces, cuando colocamos el papel de aluminio en la zona dolorida, la lámina es capaz de reflejar el campo magnético primario de la Tierra y aumentar su efecto positivo al funcionar como si fuera una especie de lupa. Además, también evita que penetre cualquier tipo de radiación inarmónica de fuera de nuestro cuerpo.
Así pues, el papel de aluminio que todos utilizamos en la cocina puede ayudarnos a combatir dolores de músculos, huesos, cuello, articulaciones, torceduras e incluso los causados por enfermedades como la artritis o por una intervención quirúrgica. Ya ha resultado muy beneficioso para pacientes que sufren de condiciones como la gota, la ciática o el reumatismo.
Este tratamiento es realmente efectivo y rápido, tanto que llega a sorprender. Solo tienes que cortar un trozo de papel de aluminio que sea lo suficientemente largo para poder vendar la zona afectada. Debes repetir este proceso durante al menos 12 días de forma consecutiva.
Puedes ponerlo por la noche y dejarlo actuar mientras dormimos, pues tiene que estar puesto durante 10 o 12 horas. Pasados esos 12 días, descansa diez y puedes repetir el proceso.
