Ilona Staller, que es como se llamaba en realidad, llegó a ser una celebridad en Italia o España en este tipo de cine. Ahora, tras retirarse de su etapa como diputada busca productor para su «última película de culto erótica después de 27 años». Cicciolina dice que «no será un regreso, sino el regalo más grande a mis fans».
Staller, nacida en Budapest el 26 de noviembre de 1951 e hija de un funcionario del Ministerio del Interior de la Hungría comunista, llegó a Italia cuando tenía veinte años. Un encuentro casual con Riccardo Schicchi, el rey del porno italiano, le cambió la vida: a fines de los 70 la lanzó como estrella erótica por su especial amalgama entre candor infantil y diosa del sexo hardcore.
Con su vestidito blanco y su corona de flores sobre el cabello, Cicciolina se convirtió en el ícono de la transgresión: fue suyo el primer seno desnudo que se vio en transmisión televisiva en directo en Italia, en la RAI (radio y televisión pública), en 1978.
La idea de ingresar a la política le rondaba desde 1979, cuando se había presentado en una 'Lista del Sole', que fue un completo fracaso. En 1987 logró ser elegida diputada como segunda cabeza de lista del Partido Radical, que obtuvo 20.000 votos, gracias a su discurso en pro de los derechos humanos y en contra de la energía nuclear y al apoyo de sus 'cicciolinos', los fans de su programa radial erótico. Cuatro años después fundó el Partido del Amor.