Hoy en día los partos en casa se han hecho bastante populares, no creas que es como en las épocas de nuestros abuelos que todo ocurría en la cama, hoy llevan unas tinas inflables donde la madre da a luz con ayuda de parteras, dicen que es una experiencia única. Justo eso es lo que quería vivir Alana Ferreira con su segundo bebé.
Alana contaba con el apoyo de su marido y su hija Luiza para el gran día, además contrató los servicios de Michel Pampanin, una fotógrafa que captaría los mejores momentos del parto y fue ella quien compartió algunas imágenes en redes sociales, el resultado fue espectacular.
El momento llegó, empezaron las contracciones y Alana veía como todo se preparaba para la llegada de su bebé. Luiza andaba ocupada también eligiendo el primer conjunto de ropa que su hermanito usaría, estaba muy emocionada.

Los dolores subían su intensidad pero Alana trataba de mantener el buen humor, hacía caras para la cámara cada que podía.

Al estar completamente dilatada y empezar a pujar, Alana recibió ayuda de una persona muy especial : su hija Luiza. Rápidamente la niña se metió en la piscina y ayudó a su madre.


Así llegó el pequeño Benjamín al mundo, todo era alegría en el ambiente y Alana por unos cuantos segundos se olvidó del dolor, sólo podía sentir dicha al sostener a su pequeño junto a su pecho y ver la cara de Luiza, quien estaba impresionada con la valentía de su madre.


Las parteras lavaron al bebé y luego de pasar unos minutos con su madre, le colocaron el conjunto que Luiza había elegido con tanto amor. Ella estaba lista para asumir su papel de hermana mayor.

¿Te atreverías a tener un parto en casa?
Fuente: Nolocreo