Desde el inicio de los Juegos Olímpicos hemos podido ver una especie de círculos rojos a la altura de la espalda o los hombros de varios atletas.
Se han creado todo tipo de historias al rededor de estos círculos, pero solamente son el resultado de un tratamiento llamado ventosaterapia, utilizado por deportistas como Michael Phelps para la relajación de músculos y la disminución del ardor e hinchazón de los mismos.
Consiste en calentar vasos de cristal con algodones y cuando se encuentran en su punto de mayor temperatura son puestos boca abajo sobre la zona que se desea estimular, succionando la piel.
Se trata de una solución milenaria y que funciona de dos formas: se puede usar en seco, donde hay succión, o húmeda provocando un sangrado controlado en la piel.
Aunque también hay otros deportistas como el nadador bielorruso Pavel Yankovich, que llevó esta actividad al extremo, como lo podemos ver en su cuenta de instagram.
Hasta el momento no existe una base científica que explique este método de relajación muscular. Sin embargo, solo los mejores atletas del mundo tienen acceso a él, misma razón por la que el Comité Olímpico Internacional evalúa la posibilidad de prohibirlo.
Hasta el momento no existe una base científica que explique este método de relajación muscular. Sin embargo, solo los mejores atletas del mundo tienen acceso a él, misma razón por la que el Comité Olímpico Internacional evalúa la posibilidad de prohibirlo.