En una fiesta infantil los animadores, que estaban disfrazados de superhéroes, se disponían a presentar la principal escena de la velada con nada más ni nada menos que el 'Increíble Hulk'. Aunque el inmenso hombre verde trataba de esconderse detrás de un coche, sus tres metros de altura lo hacían ya visible para el público en general.
ANUNCIO PATROCINADO



Con la tecnología de Blogger.