El segundo hogar de la red, son los cables. Muy poca información se transmite por vía satelital, la mayoría utiliza los 885.000 kilómetros de cable alrededor del mundo para cubrir todo el planeta.
Finalmente, el tercer hábitat natural de internet son los data center o centro de procesamiento de datos, enormes edificios donde se procesa y guarda toda la información, desde los vídeos, las imágenes, hasta este mismo artículo. Son uno de los grandes consumidores de energía eléctrica tanto por el consumo de las máquinas como por la refrigeración que precisan para funcionar correctamente. En total se estima que consumen el 1,5% de la electricidad del planeta. A día de hoy hay más de cinco millones de centros de datos, pero en 2017 llegarán a los 8,6 millones de acuerdo con un reciente estudio.
La llave que abre estas tres puertas, las tienen apenas 7 personas en el mundo, que son las encargadas de reiniciar todo el sistema en caso de que un desastre natural o un atentado tire por tierra todo el sistema. Si quitamos todos los adornos (servidores, cables, centros de datos y máquinas) y nos quedamos con la información digital, unos 5 millones de TB que viajan de un sitio a otro, internet pesa apenas 50 gramos.