George Roter, uno de los desarrolladores, comunicó el fin del sistema operativo: "El hecho de que haya múltiples sistemas operativos y ecosistemas de aplicaciones ya establecidos significó que nos teníamos que poner al día constantemente y las condiciones no estaban dadas para ganar en el terreno de los smartphones comerciales".
Uno de los grandes "problemas" de Firefox OS es que no corría aplicaciones nativas sino que todas eran aplicaciones web. Y además está el hecho de que los equipos con Firefox OS eran casi todos de gama baja y que encontrar uno a la venta no era algo tan fácil.
Con toda seguridad, Firefox OS seguirá su camino en el futuro; simplemente, no en el teléfono. Para el teléfono están Android, iOS y Windows Phone, ese último cada vez con menos relevancia.
En mayo de este año despedirán al Firefox OS que, la verdad, no pudo ni hacer presencia en la carrera tecnológica móvil.