Morales acusa a EEUU de usar la lucha antidroga para intervenir en otros países

El presidente de Bolivia, Evo Morales, anuncia el fracaso de la lucha antidroga de Estados Unidos, que tacha de estrategia geopolítica para intervenir en otros países.

"Desde la década del 80, la mal llamada guerra a las drogas nos ha llevado a un escenario que sistemáticamente violentó la soberanía de los países y deterioró las condiciones de salud pública y seguridad interna", ha denunciado Morales durante un discurso presentado este jueves en una sesión especial de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) titulada Problema Mundial de las Droga.

Morales ha cuestionado los resultados de la política sobre drogas de EE.UU. en su mismo país, que muestra una tasa alta de uso en comparación con la media internacional.

Desde la década del 80, la mal llamada guerra a las drogas nos ha llevado a un escenario que sistemáticamente violentó la soberanía de los países y deterioró las condiciones de salud pública y seguridad interna", ha denunciado Evo Morales en la ONU.

"La tasa del consumo de coca en Estados Unidos es de 1,6 por ciento, mientras que la media mundial es de 0,4 por ciento", ha precisado Morales.

El mandatario boliviano ha pedido también a los autoridades asistentes la disolución de la Agencia Antidroga de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), así como el cierre de las bases norteamericanas para "asumir acciones concretas" contra las drogas.


“Pido a esta Asamblea que sumemos acciones concretas para liberarnos del problema de las drogas como pretexto de dominación. Disolver la DEA, cerrar las bases militares norteamericanas, acabar con el intervencionismo, acabar con la certificación unilateral, y aprobar una resolución para terminar de una vez por todas con el secreto bancario”, ha dicho.

Según los datos de ONU, ha explicado Morales, el consumo de drogas ha aumentado un 40 % en la últimos años; durante 2013, más de 246 millones personas consumieron drogas ilegales en el mundo.

El jefe del Ejecutivo boliviano ha defendido la estrategia de su Gobierno, que logró reducir el cultivo de hoja de coca, entre el 2011 y el 2014, un 34 %, llegando a una superficie neta de 20.400 hectáreas.

De este modo, el jefe de Estado boliviano ha pedido a los países del mundo que examinen con profundidad las medidas necesarias para frenar la economía ilegal del narcotráfico, respetando al mismo tiempo el derecho interno de cada país.

"Finalmente, el Estado de Bolivia considera la necesidad de un debate amplio y diverso basado en las realidades de cada país, en el marco del principio de soberanía principio de no intervención y conforme al derecho interno de los Estados", ha concluido.

En 2008, Morales acusó a la DEA de conspirar contra su Gobierno y ordenó la expulsión de esta agencia norteamericana.

Hispantv

Con la tecnología de Blogger.