El presidente de EE.UU, Barack Obama, ha prometido a su par ecuatoriano, Rafael Correa, ayuda humanitaria para la reconstrucción del país tras el terremoto del sábado, ha informado este martes la Casa Blanca.
De acuerdo con la Presidencia estadounidense, Obama se comunicó con Correa "para expresarle sus condolencias y la de los estadounidenses ante la pérdidas de vidas" a causa del terremoto del sábado.
Obama "ha asegurado a su homólogo ecuatoriano que Estados Unidos hará todo lo que pueda para ofrecer apoyo a la reconstrucción de Ecuador. El presidente Correa ha agradecido a los estadounidenses por su asistencia en este difícil momento", según la nota de Casa Blanca.
Obama "ha asegurado a su homólogo ecuatoriano que Estados Unidos hará todo lo que pueda para ofrecer apoyo a la reconstrucción de Ecuador. El presidente Correa ha agradecido a los estadounidenses por su asistencia en este difícil momento", según la nota de Casa Blanca.
Poco antes, en la misma jornada, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, también hizo una oferta de ayuda a su homólogo ecuatoriano, Guillaume Long.
Los dos diplomáticos hablaron, además, sobre la llegada a Ecuador de un equipo de la Agencia Estadounidense para Ayuda al Desarrollo (USAID, por sus siglas en inglés) para colaborar en "la distribución de ayuda de emergencia a las poblaciones afectadas por el terremoto".
El viceministro ecuatoriano del Interior, Diego Fuentes, informa este mismo martes de que el número de víctimas mortales ha ascendido a 480, con más de 2500 heridos y unos 1700 desaparecidos hasta el momento.
El lunes, el Banco Mundial puso a disposición de Ecuador recursos por unos 150 millones de dólares para inversiones en infraestructura y atención a emergencias: provienen de un fondo destinado a Ecuador por esta entidad apenas hace un mes.
Un terremoto de magnitud 7,8 en la escala de Richter sacudió el norte de la región costera de Ecuador el pasado 16 de abril y se cobró la vida de centenares de personas. Además, contó con una serie de fuertes réplicas. El epicentro se ubicó a unos 165 kilómetros de la capital ecuatoriana, Quito.
Las labores de rescate continúan por todo el país y todavía hay esperanza de hallar personas vivas bajo los escombros.
Hispantv