Gachas
Para el almuerzo o el desayuno, en La Mancha o en el norte de Europa, las gachas son un clásico de la alimentación mundial. La receta de cocer cereales con agua o leche y servirlos calientes se remonta hasta por lo menos el Neolítico: en Europa central y Escandinavia se han encontrado gachas de avena dentro de los estómagos de cadáveres con 5.000 años de solera. Aún hoy forman parte de la dieta de varios de esos países, así que a quitarse el sombrero (y aflojarse el cinturón) ante ellas.
Gofio
Nos vamos a nuestras islas Canarias. El gofio es la harina tostada de trigo o maíz, un básico en la gastronomía insular. Los guanches (habitantes de la isla antes de la conquista española) ya la consumían amasándola con agua, sal y en ocasiones frutos secos. En la actualidad también se come así, y se puede encontrar con plátano o en forma de helado.
Sopa de cebolla
Sopas hay muchas, pero la de cebolla es una de las más clásicas. Se dice que ya en la época romana y griega existían recetas con el vegetal que más nos hace llorar y que se consumía mucho, debido a la abundancia de cebollas que había en los campos. En la actualidad, la receta más común dice que la cebolla, cortada en juliana, debe cocer hasta caramelizar. La boca agua solo de pensarlo.
Kebab
Aunque el kebab tal y como lo conocemos hoy en día, servido dentro de un pan fino, es un invento del siglo XX, la idea de asar carne insertada en un palo ya estaba presente en la antigua Grecia; de hecho, se han encontrado ‘parrillas’ de kebab de aquella época, como la de la foto superior. La palabra kebab hace referencia a la carne cocinada con un pincho y a este pincho. Hay quien incluso dice que este tipo de procedimiento es tan antiguo como la propia historia, pues comenzaría cuando los humanos empezaron a cocinar con fuego. Otra cosa es que, con el paso del tiempo, nos la hayamos comido en pinchitos, láminas o, como en la actualidad, en una especie de bocadillo con pan, lechuga, tomate y salsa de yogur.
‘Noodles’
A pesar de que estos fideos largos se han popularizado desde hace unos años como una opción de comida rápida, su historia nos lleva a la China de hace 4000 años, donde ya se consumían. Unos científicos encontraron unos fideos elaborados con mijo (ahora se suelen hacer con trigo) y los dataron con esa fecha. Su investigación se publicó en ‘Nature’ en 2005 y determinó que la potencia asiática era el lugar de nacimiento de esta comida universal.
Tofu
También en China se originó hace 2000 años este preparado de semillas de soja, agua y un coagulante que da como resultado una pasta blanca parecida al queso fresco. Se cree que su expansión por todo el mundo coincidió con la del budismo, porque es una fuente de proteínas importante para su dieta vegetariana. Seguro que si eres vegano estará entre tus platos de cabecera.
Yogur
Lo compras en el supermercado o lo preparas en tu yogurtera, pero fueron muchas culturas las que en la antigüedad comenzaron a fermentar la leche para su consumo. Los tracios, que vivían en lo que hoy es Bulgaria, utilizaban sacos hechos con el estómago de una cabra para transportar la leche recién ordeñada y cuyas bacterias provocaban la fermentación. De ahí a la elaboración del yogur o del queso solo había un paso.
Salchichas de cerdo
Cicerón (106 a.C. – 43 a.C.) ya hablaba de la lucanica, un tipo de salchicha procedente de Lucania, una región del sur de Italia en lo que hoy se conoce como Basilicata. Hecha con carne de cerdo, hierbas y especias, era como una longaniza de la actualidad. La receta se difundió por todo el Mediterráneo (de hecho ‘lukaniko’ es el nombre griego para la salchicha de cerdo) y ya es fácil encontrar salchichas en todas partes.
Lentejas
¿Te gusta la sopa de lentejas? Pues ya tienes algo en común con los literatos de la antigua Grecia. El dramaturgo Aristófanes dijo de ellas que son “la más dulce de las exquisiteces”. Incluso, en el Génesis se menciona: Jacob da a su hermano Esaú un plato de lentejas. Desde luego, una sopa de alta alcurnia, pero no sabemos si entonces llevaban chorizo.
Curry
Y terminamos con una mezcla ideal para acompañar carnes, arroces… Unos arqueólogos encontraron en la India unos morteros que atribuyeron a la cultura del valle del Indo y dataron en el 2600 a.C. Según ellos, sirvieron para moler especias como la mostaza, el hinojo o la pimienta negra, que ya estaban presentes en la zona por entonces. Parece que fue en aquel momento cuando nuestros antepasados comenzaron a usar una mezcla de picantes para sus comidas. ¿Tendrían al lado también un buen vaso de agua?