Según informa el diario The Asahi Shimbum, el nuevo procedimiento comenzará a funcionar en abril. Las 102 comisarías de las principales ciudades japonesas ya se están dotando de cámaras 3D y el software apropiado para las capturas.
La idea es que el escaneo facial en 3D se añada a la ficha policial convencional, que actualmente cuenta con fotos de frente y de perfil de la cara. También se realizan fotos de frente y de perfil de cuerpo entero. Con la medida, la policía aspira a identificar más fácilmente a sospechosos con antecedentes. La medida no es una ocurrencia nueva. El departamento de policía lleva desde 2001 probando estas cámaras para su implantación.