Un alto diplomático sirio arremetió contra ciertos países que utilizan el término de los derechos humanos para derrocar a los Estados que no son afines a la arrogancia.
El representante de Siria ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Bashar al-Yafari, lamentó el “doble rasero” aplicado por ciertas potencias mundiales sobre el tema de los derechos humanos y criticó que ese término sea utilizado como una vana excusa para entrometerse en los asuntos internos de las naciones soberanas.
En su intervención el miércoles en una reunión de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) en Nueva York, EE.UU., el diplomático sirio consideró los derechos humanos como una cuestión clave, a la que todos deben respetar, además de evitar que el tema se convierta en un medio para fomentar el terrorismo, la anarquía y la inseguridad en los países.
La nación siria sufrió todos estos problemas cuando dichos países utilizaron el término ‘yihadista’ para los terroristas que tenían la misión de derramar la sangre de los sirios y destruir su país”, lamentó el representante de Siria ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Bashar al-Yafari
Para Al-Yafari, lo sucedido en Irak y Libia es el mejor ejemplo de cómo el término de los derechos humanos fue utilizado para someter a estas naciones a la explotación foránea, al desplazamiento y al asesinato en masa.
Los países, agregó, que derraman “lágrimas de cocodrilo” por los desplazados —un gran número de ellos sirios— no hacen ninguna referencia en sus informes a la situación de los migrantes en Europa ni al sufrimiento de esta población, ni incluso a la cifra de los terroristas que entrenaron y financiaron para después enviarlos a Siria.
“La nación siria sufrió todos estos problemas cuando dichos países utilizaron el término ‘yihadista’ para los terroristas que tenían la misión de derramar la sangre de los sirios y destruir su país”, lamentó el diplomático sirio.
Desde hace un lustro Siria vive sumida en un conflicto desencadenado por grupos armados y terroristas que han dejado unos 400.000 muertos, según estima el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura.
Hispantv